Entre campos de cultivos y herbazales se alzan las espigas amarillentas de la Reseda lutea.
Se trata de una hierba anual perenne de la familia de las Resedaceae. Es de porte erguido con tallos ramosos o papilosos. Crece en campos de cultivo, herbazales nitrófilos y terrenos alterados hasta alcanzar los 50cm de altura.
Sus hojas basales miden de 4-12×1-2,5cm y están dispuestas en roseta. Las hojas superiores miden de 3 a 7mm de ancho y están divididas en de 1 a 3 pares de lóbulos.
De marzo a junio surgen sus pequeñas flores amarillas de 6 sépalos, 6 pétalos y 6mm de ancho, en inflorescencias con forma de largas espigas.
Sus frutos, en forma vaimas obovoides, trilobuladas, con 3 dientes muy cortos, contienen caṕsulas de entre 7 a 15mm con semillas carunculadas de unos 2mm.
El término latino Reseda aparece ya en Plinio en referencia a una planta de los alrededores de Rimini (Italia) y proviene del latín resedo (sosegar, calmar) refiriéndose posiblemente a la Reseda alba.
El epíteto latino lutea, proviene de luteum, -i (teñir de amarillo).
Además de la referencia al uso de su coloración. La reseda presenta propiedades diuréticas, calmantes, antirreumáticas, anticatarrales y sudoríficas.