Angustias, Arcadas, Auxilio y Socorro son cuatro venerables iaias de Las Primigenias que llevan eones dándole a eso del ganchillo.
Cuentan que comenzaron una bufanda a inicios del Holoceno y a día de hoy ahí siguen; de vez en cuando paran para realizar otros encargos, para después volver a la guerra.
Tanto tiempo dándole a la aguja ha hecho que desarrollen una capacidad sin par, apretan tanto el nudo que rozan la singularidad, dando como resultado un material tan liviano y resistente que ni las telas de araña, el klevlar, vibranium, adamantium o los calcetines zurcidos con huevo de madera: tal consistencia tiene el asunto que ha recibido el nombre de Mizril entre la gente de la Resistencia. Especialmente los Rolmasters la flipan en colores y tiran dados al aire (aunque caigan fuera de la mesa) cada vez que uno de los suyos trae una capa, poncho, chaquetilla, pantalones o un tapetito de combate del supercalifragilísticosacrosantomaravilloso material.
Así que no es de extrañar que cada seis (2×3 para los matemáticos) se reúnan expediciones dispuestas a enfrentarse a una muerte segura (por tedio, vértigo y cansancio) para llegar hasta su templo (así se llaman las dependencias de cada venerable de Las Primigenias).
Estas expediciones se preparan debidamente. Tras pasar la noche viendo “Al filo de lo imposible”, mientras velan su equipo de escalada, reúnen ofrendas de algo dulce (turrón del bueno, peladillas, yemitas de Santa Teresa, huesitos de santo o callos con azúcar glas) y comienzan el viaje de acuerdo a la vieja usanza: un pie delante y otro después (esperando a que baje el primero para no piñarse nada más empezar). Las indicaciones son sencillas y claras:
Sube más que si fueras a la garganta del mundo.
Cuando solo veas cabras es que te vas acercando.
Cuando ya no haya ni estas, es que estás a punto de llegar.
Una vez allí deberás pasar por El Vigilante (un portero automático modelo antediluviano, que necesita un octavo Dan en puzzles para hacerlo funcionar).
Al entrar, deberás mantener la cabeza fría y tener bien claro tu objetivo, porque hay bastantes más templos a cada cual más interesante; para, finalmente, ante Las Tejedoras de Mizril, esperar el instante exacto entre punto y vuelta para dar la ofrenda y pedir el tejido a cambio.
No tiene pérdida, de veras… o eso dicen al menos los que nunca han vuelto.
HOJA DE PERSONAJE
Las Tejedoras de Mizril son seres antiquísimos y por lo tanto deben ser eternas e inmortales, así que no hay atributos, habilidades ni mandangas. A efectos prácticos tienen Tejer a nivel dios y Potra infinita (que viene a ser que hagas lo que te salga del píloro o vario). Pero vamos, que esto es Fanhunter y la última palabra siempre la tiene el Animador/Máster/Evocador que pa eso dirige y aguanta al resto, leñe!
En cuanto al Mizril, funciona como una armadura mixta X12sinsín: sin peso, ni pilas ni na que cueste algo o tenga pegas (que para eso han tenido que subir más que pa visitar a los barbas grises).