El pistolero
—¿Qué pasa? —Es Slade; va a por el joven Quentin. —¿A por Quentin? —Sí, por lo de Jackson. —¡Pero si él no tuvo nada que ver! —Eso da igual. Jackson quiere alguien que pague los platos rotos. —No tiene nada que hacer… —Está muerto ya. Antes siquiera de que pueda plantearse desenfundar, estará boqueando en […]