Dandelion

Cuando Gamlion nació, se tomó su tiempo en sonreir a su madre y empezó a correr. Desde entonces no paró. Jugaba, reía, cantaba y lloraba hasta que la noche, en un momento de pausa, lo pillaba desprevenido, derrotándolo hasta el amanecer de un nuevo día. Su padre, antiguo explorador, dejó los caminos y se quedó […]