Tallos abiertos, manojos de verdes dedos, agarran el cielo; lanzan soles amarillos con los calores; y estrellas rojas al llegar los fríos.
La Fumana ericoides, jara tomillo o estepa groga es una planta de la familia de las cistáceas, de ramas dispersas, ligeramente pubescentes. Crece en zona de matorral, a campo abierto y soleado, entre coronillas de frailes, romeros y tomillos, hasta alcanzar los 30cm de altura.
Sus hojas brotan del tallo en grupos axilares, alternas en la parte superior, son pequeñas, alargadas, lineares, enhiestas, ligeramente carnosas y redondeadas en su parte terminal.
De marzo a agosto surgen sus flores amarillas, bien solitarias o en grupos de 2 a 3 en las cimas. Los sépalos son glabrescentes y presentan pelos rojizos en el margen.
Su fruto, que surge en forma de cápsula glabra, contiene de 8 a 12 semillas pardas.
El término Fumana proviene del latín y parece hacer referencia al color grisáceo, similar al humo, que presenta.
El epíteto ericoides indica la similitud de la jara tomillo o herba de setge con la Erica (brezo).
La Fumana ericoides es muy similar a la Fumana thymifolia, distinguiéndose esta última porque sus hojas presentan dos estípulos (como si fueran dos pequeñas hojas) aparentando crecer en grupos de tres.
Tradicionalmente se ha usado como remedio diurético. Aunque en el medio que crece defiende lo verde en primera línea de sol, junto a otros matorrales, justo en esa frontera que divide el paisaje mediterráneo de la aridez.