Sobre penachos de tiras glaucas, algo lacias, surgen, recios y carnosos, cuencos verdes que abrigan dos pequeños cuernos unidos en amarillo en su interior.
La lechetrezna de campo o lletera de camp es una hierba anual y perenne de la familia de las euphorbiaceae, que puede alcanzar los 50cm de altura.
Se trata de una planta leñosa en base, con tallos glabros y rectos de tono rojizo en la parte inferior que exhudan un látex blanco, tóxico, al romperse.
La lechetrezna de campo es muy resistente y adaptativa. Aguanta bien la sequía y puede resistir heladas no demasiado fuertes (hasta los -2Cº). Crece en márgenes de camino, terrenos baldíos, entre matorrales y campos y frutales de secano, de ahí su nombre común de tártago de campo o lechetrezna de campo.
Sus hojas son largas y agudas (27-40 x 2-4mm), oval-lanceoladas, lineares, enteras y de color glauco.
Las inflorescencias surgen en la parte superior, con hojas densamente dispuestas y brácteas deltoideas, rombicodeltoideas o semicirculares. Los nectarios poseen dos apéndices (de 0,3 a 1mm) corniculados. Florece durante todo el año pero especialmente en primavera.
Su fruto (2,8-3,4 x 3-3,5mm) tiene forma de cápsula lisa subesférica y sus semillas están surcadas transversalmente.
El término Euphorbia hace referencia a Euforbo el médico griego del rey Juba II de Mauritania.
El epítelo latino segetalis proviene de seges, -etis que hace referencia al campo de cereales y más concretamente a la mies antes de ser segada, por lo que suele traducirse como “entre la mies”.
Antiguamente se usaba el látex de la lechetrezna como veneno, laxante, antiséptico y para tratar las verrugas; aunque no es muy recomendable su uso, debido a su toxicidad.